von Nico Kuhlmann
Un artículo publicado recientemente presenta los resultados de un proyecto conjunto, realizado por el Foro Económico Mundial y McKinsey & Company, que estudió el impacto de las tecnologías emergentes – inteligencia artificial, realidad aumentada, realidad virtual y blockchain – en la economía creativa. El equipo del proyecto realizó más de 50 entrevistas con expertos de Asia, Europa y América del Norte, así como tres talleres en China y los Estados Unidos con participantes del Foro Económico Mundial. Dada la diversa madurez de las diferentes tecnologías, es demasiado pronto para afirmar definitivamente cómo cambiarán la economía creativa. Sin embargo, en este documento se esbozan las oportunidades y preocupaciones de cada tecnología y se presentan sugerencias sobre dónde se podría concentrar la atención si se quieren obtener los beneficios.
Las principales conclusiones son las siguientes:
La inteligencia artificial (IA) está cambiando las cadenas de valor del contenido creativo de principio a fin, lo que está teniendo un impacto positivo y negativo en la sociedad.
La IA ayuda a los creadores a hacer coincidir el contenido con el público de manera más efectiva al aprender y clasificar las preferencias de los usuarios, lo que permite a los proveedores
recomendar contenido personalizado específicamente. La IA se está utilizando para crear contenido en industrias creativas, como la música, el arte, la moda y el cine. Asimismo, puede ayudar a la producción mediante la realización de tareas que son demasiado difíciles o que consumen mucho tiempo para los seres humanos. Estos avances positivos están alterando las cadenas de valor en toda la economía creativa, pero también tienen impactos negativos. Por ejemplo, la desinformación y la desinformación en las redes sociales se ven exacerbadas por algoritmos que fomentan el intercambio viral. Como resultado, se está debatiendo el nivel adecuado de responsabilidad de los desarrolladores de IA.
La realidad aumentada y virtual (AR / VR) puede transformar la narración de historias y la forma en que se experimenta el contenido, pero los incentivos empresariales para hacerlo pueden no estar completamente alineados con el bienestar individual.
AR y VR, tecnologías inmersivas, pueden alterar drásticamente la experiencia del consumo de contenido. Tienen la capacidad de promover sentimientos, habilidades y comprensión nuevos y significativos, lo que puede hacer que el contenido sea más poderoso que cuando se presenta a través de los medios tradicionales. A medida que disminuye el costo de la tecnología inmersiva, los creadores pueden redefinir la narración y el contenido narrativo en un medio completamente nuevo. En el entorno actual, los consumidores pasan una cantidad cada vez mayor de su tiempo libre utilizando dispositivos basados en pantalla. Dado que la tecnología inmersiva tiene el potencial de ser más atractiva y capturar datos personales más íntimos de los usuarios, existen riesgos de que los incentivos empresariales de desarrollar medios inmersivos puedan ir en contra de las prácticas que protegen el bienestar individual.
La economía creativa y la economía de las plataformas están convergiendo, redefiniendo la relación entre creadores, editores y empresas de tecnología e introduciendo problemas de gobernanza difíciles.
Los editores pueden usar la tecnología para ampliar las audiencias, pero las plataformas tecnológicas (empresas que hacen coincidir las empresas con los clientes) también tienen un gran impacto en la forma en que se descubre el contenido. Unos pocos proveedores son responsables de la mayoría del tráfico de referencias, y solo cinco empresas absorben casi el 80% de los ingresos globales de publicidad móvil. Esto está redefiniendo la relación entre los editores y las plataformas. A medida que las plataformas se involucran más en las decisiones editoriales (influenciando y decidiendo qué tipo de contenido se ve y por qué), la responsabilidad de los editores se mueve hacia las plataformas tecnológicas. Los marcos para gobernar esta nueva dinámica aún no están suficientemente desarrollados.
Blockchain es la menos avanzada de todas las tecnologías, aunque es prometedora para la economía creativa, requiere un mayor desarrollo.
Blockchain es emocionante para muchos creadores debido a su potencial para cambiar el control que los artistas tienen sobre su trabajo, en particular la remuneración, los derechos de producción, la monetización de terceros y la transferencia de datos del trabajo creativo. Sin embargo, no existen suficientes casos de uso para confiar en la capacidad de la tecnología para promover un cambio positivo. Además, los costos de desarrollar estos casos de uso, en términos de recursos e inercia, pueden ser demasiado altos para ser viables para aplicaciones creativas.
Se requiere la colaboración de múltiples partes interesadas para que el cambio sea efectivo.
Hay razones para entusiasmarse con la adopción de tecnologías emergentes en la economía creativa, pero también algunas implicaciones negativas que vale la pena considerar. Existen iniciativas que tratan de mitigar los resultados perjudiciales, pero abordarlos de forma aislada puede dejar fuera de la conversación voces importantes. El Foro Económico Mundial proporciona una plataforma para que los sectores público y privado, así como los académicos y la sociedad civil, se reúnan y aborden las cuestiones de manera integral. En muchos casos, el Centro para la Cuarta Revolución Industrial del Foro está a la vanguardia de los debates. Al mismo tiempo, siempre hay margen para un debate más informado, y se han formulado recomendaciones sobre dónde podría concentrarse la atención para cada tecnología.
Lea el documento completo aquí: La disrupción creativa: El impacto de las tecnologías emergentes en la economía creativa