Cuando se planta un cornejo puede ser tan importante como cómo se fertiliza, riega y mantiene. Plantar durante el tiempo en que el árbol está tratando activamente de florecer o crecer puede resultar en un crecimiento atrofiado o difícil y la introducción de enfermedades. Es importante permitir que el árbol enfoque su energía en una sola dirección, como establecer un sistema de raíces en su nueva ubicación, en lugar de tratar de crecer y florecer al mismo tiempo que establece raíces.
Principios de primavera
La mayoría de los expertos, incluidos los de treehelp.com, recomienda plantar cornejos a principios de primavera. Plantar antes de que el árbol comience a brotar le da tiempo para adaptarse a su nueva ubicación y comenzar a desarrollar un sistema de raíces fuerte. La primavera también es ideal porque el suelo suele ser húmedo y propicio para la siembra.
Finales de otoño
Debido a que los cornejos también están inactivos a finales de otoño, también es un buen momento para plantar. Después de que el árbol se adormezca, pero antes de que el suelo se congele es ideal. Dado que en algunas áreas el otoño es más seco que en la primavera, es importante asegurarse de que el cornejo reciba suficiente agua.
Elegir entre primavera y otoño
Si el mejor momento para plantar es primavera u otoño, depende de su clima. Determine qué estación tiene más lluvia o humedad y temperaturas más suaves. La duración de la temporada también es una consideración importante. Las estaciones extendidas permiten que el árbol tenga más tiempo para establecer un sistema de raíces fuerte. La plantación de otoño a menudo puede permitir que un árbol establezca raíces durante el invierno y florezca bien en la próxima temporada de crecimiento, pero en algunas áreas las enfermedades que afectan a los árboles de cornejo también son más frecuentes en el otoño.