La tecnología ha estado afectando negativamente a la sociedad desde los primeros avances tecnológicos hasta el día de hoy, y continuará dañándonos en el futuro previsible.
La tecnología viene en muchas formas, todas con el objetivo principal de ayudar a las personas a realizar una tarea que no desean o no pueden realizar por su cuenta. Si bien las intenciones de las personas son buenas, hay muchas formas de tecnología que han crecido para ser reverenciadas como una especie de dispositivo mágico, o la creación de una obra mucho más impresionante de lo que el hombre podría haber creado. Como afirma Jean Rostand, «La ciencia nos ha hecho dioses incluso antes de que seamos dignos de ser hombres». La increíble cantidad de poder que ahora tenemos en nuestros bolsillos a menudo se da por sentado. La tecnología en el pasado estaba destinada simplemente a ayudar a la sociedad con problemas, como la creación de la bombilla en lugar de la luz de las velas. Hoy en día, la tecnología se ha desviado de ser simplemente útil, y se ha convertido en algo que nosotros, los creadores, somos incapaces de explicar o controlar completamente. La tecnología actual ha consumido nuestras vidas, y las personas se han vuelto muy dependientes de sus dispositivos para hacer sus vidas simples y fáciles. Ejemplos de esto se pueden ver en todas partes, desde adolescentes que se vuelven adictos a sus teléfonos, hasta Amazon y otros sitios web que entregan todo, incluida la comida, directamente a su puerta. La tecnología ha hecho que la gente de nuestra sociedad sea perezosa y, en su mayor parte, incapaz de pensar por sí misma. Ha superado con creces sus objetivos originales de iluminar una habitación oscura. En el futuro, la tecnología seguirá penetrando en todos los aspectos de nuestras vidas. Incluso comenzará a convertirse en parte de nosotros, con la tecnología portátil o los implantes pronto siendo la elección de moda o estilo convencional. Incluso hoy en día, las lentes de contacto, los relojes y los anteojos tienen una tecnología incorporada que va más allá de la simple comodidad y comienza a apoyarse en los deseos en lugar de en las necesidades. Esta es una tendencia que continuará en el futuro. Max Frisch expresó perfectamente esta idea: «Tecnología: la habilidad de organizar el mundo de tal manera que no tengamos que experimentarlo». Hoy y en los próximos años, la gente seguirá utilizando la tecnología como medio de interacción sin tener que salir de su hogar. Esta es una forma de vida poco saludable, y ha llegado a ser la norma debido a los dispositivos que habitan en nuestros hogares, bolsillos y cuerpos, y continuará siendo un problema creciente en los próximos años.